Hoy queremos dejar aquí nuestra más vehemente defensa de las personas que viven su vida pensando en mejorar la vida de los demás. Este es el caso de una mujer "cien", Nobel en Medicina, que a sus cien años de edad sigue trabajando, con la piel arrugada pero el cerebro joven y brillante: Rita Levi-Montalcini. Su existencia, sus investigaciones, sus palabras y sus hechos nos hacen creer aún más en las personas.
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Cuando la sociedad se empeña en resaltar lo malo, hay seres humanos que se empeñan en dedicar su vida a los demás, sea en el terreno que sea. Gracias a Dios, aún perdura la semilla ESPERANZA, en el corazón de las personas y algunas lo demuestran con gran alegria, como Rita Levi-Montalcini. Bravo por ella. Saludos
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