martes, 12 de febrero de 2013

Placeres de la vida,

Juan Félix, un amigo y padre de nuestro colegio, nos ha hecho llegar este vídeo. Y nos ha parecido tan simpático y tan instructivo que hemos querido "subirlo" hasta aquí para compartirlo con todos vosotros. Efectivamente, nos enseña que a veces se puede ser feliz con muy poco y, sobre todo, esta pequeña historia nos sirve para que padres y maestros recordemos que los niños son niños y se comportan como tales. Algo que, por mucho que lo parezca, no es baladí ni gratuito recordarlo.
Es conveniente que ampliéis la imagen pulsando sobre el cuadrito situado en la parte inferior derecha. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario