En la foto de arriba se muestra una escena de la representación navideña de nuestro colegio. En ella el rey Melchor parece recobrar su alegría ancestral después de haberle convencido de que en este mundo, al menos los niños, siguen mereciendo la ilusión de la Navidad.
En esta otra foto de nuestro último festival navideño un niño y su abuela intentan dar un hilo conductor a la representación y simbolizar con él el sentido mismo de estas celebraciones.
Cuando llega la Navidad, una de las mejores cosas que podemos hacer -en mi opinión- es pensar más en los demás. Esos que siempre están ahí cerca y de los que no nos ocupamos demasiado, o esos otros a los que ignoramos porque nos duele su presencia. Esos otros: excluidos, emigrantes, pobres, refugiados, desahuciados, ancianos... El tiempo del Nacimiento se me antoja, sobre todo, un tiempo de los otros aunque la alteridad no se lleve mucho en nuestros días.
Desde esta humilde publicación digital quiero enviaros mi más afectuoso abrazo y mis más sinceras felicitaciones. Que el próximo año nos traiga a todos un Tiempo Nuevo y, si es posible, menos doloroso.
Os dejo una foto del belén que han hecho las maestras y los niños de primero de nuestro colegio. Confío en que su sencillez nos ayude a entender mejor el sentido de estos días.
Este año no he visto la obra de nuestro cole, porque a mi hijo no le tocaba, pero seguro, que como siempre, estuvo genial con esos grandes artistas que tenemos y ese trabajo que hay detrás de ellos mismos y sus profesores.
ResponderEliminarComo tú bien dices Jose, que este año nos venga a todos un poquito mejor y menos doloroso.
Y que la sencillez, la bondad y la inocencia que aún guardan y mantienen los más pequeños nos ayuden a sacar lo que nos quede a nosotros.
Feliz Navidad y próspero Año 2016.