En Valdepeñas, al inicio del verano
de 2015.
Queridos alumnos y queridas alumnas:
Os escribo para desearos un feliz verano.
Y para deciros que ha sido un placer
acompañaros estos dos últimos años
porque habéis sido -para mi- la vida que más
palpita.
También escribo para que sepáis que he
disfrutado mucho
porque os he visto aprender,
crecer y ser más cada día.
Y porque me habéis hecho un poco mejor
y, al final, más afincado en vuestra alegría.
Gracias, queridos alumnos y queridas alumnas.
Que tengáis un feliz verano.
Un fuerte abrazo de vuestro maestro tutor.
Como siempre, maravilloso Jose. Siempre tan atento y tan cuidadoso de los detalles, que marcan lo bueno de esta vida.
ResponderEliminarFeliz y buen verano a ti también
Gracias, Marisa, por tus amables comentarios. Esa carta, que pretende ser poética, en realidad solo dice algo -quizá con capacidad de extrañeza- de nuestros dos últimos años de convivencia en la clase. Y es que quizás la poesía sea simplemente eso: decir la vida, con sencillez y sinceridad.
ResponderEliminarGracias, de nuevo.