Ayer se celebró, en el Centro Cultural "La Confianza", el VII Día de la Educación de Valdepeñas, Distinciones y Reconocimientos Educativos "Lorenzo Luzuriaga".
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En el acto se distinguieron a dos de nuestras alumnas de sexto, Carla Cenjor Sánchez y Elena López de Lerma Cifuentes. De ellas se expusieron detalladamente sus diversos méritos y dotes personales y académicos. Pero lo que más nos emocionó a todos fue saber que han sido sus propios compañeros quienes las han caracterizado para la ocasión y quienes las han elegido para esta merecida distinción.
Desde aquí queremos felicitar a nuestras alumnas galardonadas, a sus familias orgullosas por ello y a todos los maestros que les han enseñado y ayudado a madurar día a día a lo largo de su escolaridad.
En el mismo acto, se distinguió a nuestro querido Director, que este curso acaba su mandato como tal, reconociéndole así su labor en nuestro centro durante once años en los que no cejó nunca de promover la convivencia entre todos los miembros de la Comunidad Educativa así como en promocionar la mejor respuesta educativa para todo nuestro alumnado.
Desde aquí nos unimos a ese reconocimiento, lo celebramos sinceramente y le enviamos un fuerte abrazo.
Añadir que en la foto de arriba Tomás posa con Azahara Galán Fresneda, una de las antiguas alumnas de nuestro colegio que también fue galardonada en el acto. Muchas felicidades para ella y su familia.
Felicidades a todos ellos!!! Se lo merecen. Un saludo para ti, Jose
ResponderEliminarEmotivo acto al que tuve la suerte de asistir. Enhorabuena a las alumnas por su merecido reconocimiento y por supuesto a este niño grandullón que hemos tenido la suerte de tener como Director. Un aplauso para el atento reportero y comentarista que ha tenido a bien compartirlo con todos.
ResponderEliminarGracias, Cristina. Gracias, Antonio. Es verdad que fue un acto muy emotivo. Para mí fue un placer escuchar a Mariló -una profesora "para quitarse el gorro", y a quien conoces muy bien, Antonio- evocar a Sanpedro y explicarnos lo que él creía: "que su pedagogía siempre se reducía a dos palabras: amor y provocación".
ResponderEliminarYo me pregunto muchas veces si nos olvidamos más de lo necesario de esa enseñanza y de que realmente solo aprendemos de quienes amamos y nos aman. Eso explica, por ejemplo todo lo que aprendemos de nuestros propios padres.